Por Luis Fernando Celaya

Durante los casi setenta años de historia de la Unión Soviética, su cine animado pasó por diferentes episodios, estilos visuales y narrativos; uno de sus animadores más emocionantes es Yuri Norshtéin, hoy escribiré a propósito de una de sus obras más conocidas y que goza de un gran prestigio internacional, Erizo en la niebla (1975) y en la segunda parte hablaré de El cuento de cuentos (1979).

Erizo en la niebla, es un cortometraje cuya historia relata como un pequeño erizo y una cría de oso se reúnen cada atardecer a tomar el té servido del samovar encendido con ramas de enebro, mientras un día como cualquier otro el pequeño erizo va en camino a visitar a su amigo, encuentra un bello caballo en medio de la niebla mientras se pregunta ¿Se ahogará si se duerme en ella? Así que decide acercarse y explorar la niebla por sí mismo.

Lo que parece comenzar como un cuento de hadas se transforma repentinamente en un viaje por lo desconocido, una aventura bella y sombría por las espesas nubes de niebla, pero no es tan simple como eso, nos encontramos con una serie de alegorías que representan a la vida misma, donde todo es nuevo y por descubrir, pese a que, en ocasiones, la propia vida nos lleve por caminos inciertos que nos transmiten temor, debemos tener la iniciativa de seguir avanzando, tal como lo hizo el pequeño erizo, aquella criatura misteriosa del río que se acerca mientras el erizo está indefenso y aterrado en realidad será un gran apoyo para que el erizo retome su camino.

Este mensaje tan alentador a vivir la vida intensamente y abrirse a nuevas experiencias representada por el entrañable erizo se ve contrastada con la llegada de este con su amigo el oso, esperando en el lugar de siempre, el cual se nota ansioso y nervioso de que este no llegue, su rutina se ve afectada y no sabe lidiar con este escenario, cuando por fin aparece su amigo erizo, el oso se nota sumamente aliviado y en paz, puesto que su rutina diaria no se ha visto afectada, en cierto modo es una representación del conformismo de una vida confortable, de estancamiento sin variación alguna, todo lo contrario a su amigo erizo que tras su experiencia en lo incierto de la niebla y las posibilidades de la vida queda realmente fascinado y todo termina con una frase muy conmovedora: ''¿No es maravilloso que estemos juntos de nuevo?''

Este pequeño cortometraje de 10 minutos es verdaderamente sereno y perdurable en la memoria, una obra maestra que incluso el gran director de animación japonés Hayao Miyazaki la ha descrito como su obra favorita, algunos críticos han señalado la influencia de Norshtéin en la estética naturalista de Miyazaki, especialmente en los bosques de Princesa Mononoke (1997), justamente Erizo en la niebla fue elegida como "La mejor película de animación de todos los tiempos" en Laputa Animation Festival celebrado en Tokyo en la cual votaron 140 animadores de todo el mundo en el año 2003.

Personalmente, yo solía pensar de la misma manera, nunca había presenciado una película animada que me causara tanta consonancia y me suscitará un estado de parsimonia, hasta que tras terminar de mirar la película y después de unos de minutos de reflexión, comencé a mirar El cuento de cuentos (1979) otra obra del mismo director, tras veintinueve minutos de duración y haber terminado de mirarla, cambie de opinión, pero hablaremos de esa película en particular en la siguiente ocasión.

Referencias Bibliográficas:

(2021) Notes on Hedgehog in the Fog, The Magic Screen: animated shorts by Yuri Norstein, Klassiki. Recuperado 26 de Noviembre del 2022.

https://klassiki.online/wp-content/uploads/2021/01/Klassiki_HedgehogInTheHog.pdf